Ante crímenes, miedo invade la Central de Abasto de Toluca

Vinculados a grupos de extorsionadores

Los recientes asesinatos en la Central de Abasto de Toluca apuntan a cobros de piso por grupos de la delincuencia organizada. Es un secreto a voces, manifestaron locatarios, quienes viven con miedo. 

“Te levantas y no sabes dónde será el otro difunto, ahora a quien le toca porque no quiere pagar su cuota”, comentó Elena N”, empleada de una de las naves donde este martes ocurrió el asesinato de Omar, dueño de una bodega de huevo.

Antes, el 31 de agosto, el propietario de otro expendio también fue acribillado a tiros, uno de sus empleados corrió la misma suerte al tratar de defenderlo.

En ambos crímenes fue el mismo modo de operar, sujetos armados ocultándose el rostro, abrieron fuego al tener su objetivo a la vista.

Luego, así como entraron también escaparon, como si nada. Los 80 policías con que cuenta la Central de Abasto de Toluca, al igual que la Policía Municipal y Estatal, actuaron tarde.

Locatarios confirmaron que las muertes de sus compañeros están ligadas al crimen organizado. 

“No hay denuncias porque quién nos protege, nadie. Hay carteristas, asaltos a los clientes, eso ya era normal y ahora nos tenemos que acostumbrar a que nos maten, queremos a la Guardia Nacional, a ver si así al menos los asustan”, agregó otra comerciante.

La Central de Abasto de Toluca no cuenta con cámaras de seguridad, aun cuando hay ingresos. Cuenta con 2000 locales e ingresan en promedio 40 mil clientes diarios.