Ecos de la Consulta Popular

En la evaluación del ejercicio de consulta popular del domingo pasado, se aplican aquellas frases clásicas de todo depende del cristal con que se mire o la del vaso medio lleno o medio vacío. Hay opiniones a favor y en contra.

Lo cierto es que no es despreciable la participación de seis millones 663 mil 208 ciudadanos en esta praxis de democracia participativa que puede ser solicitada al Congreso de la Unión a petición del presidente de la República, los representantes populares o los mismos ciudadanos.

Esa cantidad representa el 7.11 por ciento de la lista nominal; insuficiente para que el ejercicio sea vinculatorio, ya que se requería un 40 por ciento de opiniones emitidas, que son más o menos 37 millones.

Era previsible que al contar con la lista nominal más numerosa del país, el Estado de México haya sido de las entidades que más participación reportaron: poco más de un millón, el 8.1 por ciento de los ciudadanos inscritos en el listado.

Quedan varias lecciones.

Una de origen tiene que ver con la pregunta que se realizó: compleja en su estructura y poco clara: ¿Estás de acuerdo o no en que se lleven a cabo las acciones pertinentes, con apego al marco constitucional y legal, para emprender un proceso de esclarecimiento de las decisiones políticas tomadas en los años pasados por los actores políticos, encaminado a garantizar la justicia y los derechos de las posibles víctimas?

Quizá en un futuro en ejercicios de esta naturaleza lo más conviente será una redacción clara, sencilla, directa, que por su formulación y el tema que plantee sea en sí misma atractiva y promotora de participación.

Algunas voces argumentan que faltó difusión de la consulta y le achacan esto al INE, a pesar de que este organismo no fue quien aprobó los tiempos de difusión, fue el Congreso.

El INE dio a conocer cifras de promoción. Entre ellas 377 mil 833 anuncios de radio y televisión; seis millones de mensajes y conversaciones por el chatbot Inés; 36 millones de impresiones y reproducciones en redes sociales; 186 entrevistas a consejeros con 537 mil 292 impresiones en Twitter.

No obstante lo anterior, de acuerdo con el seguimiento en redes sociales hecho por Metrics entre el 24 y 30 de julio, el tema de la consulta no fue el número uno de la agenda digital.

Los usuarios en redes sociales optaron por seguir los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 (54%); seguido del Plan de Vacunación contra Covid-19 (20%) y en un tercer sitio la Consulta Popular (16%).

Habrá que determinar si el tiempo de difusión es suficiente o se requiere ampliarlo con base en esta primera experiencia.

Lo malo fue que este ejercicio de consulta se quiso amañar con artimañas que se aplican en jornadas electorales.

El domingo además de lo ocurrido en Orizaba en donde quedó registrado en video el “embarazo” de urnas, fueron recurrentes al mediodía las llamadas de operadores políticos en algunos sitios que con cierto grado de desesperación intentaban convencer a los ciudadanos a participar, argumentando que si no lo hacían de cualquier forma su voto se contaría con un Sí. Viejas prácticas que en nada favorecen y desalientan.

Todo ejercicio es perfectible, esperemos haber aprendido de esta primera lección aun cuando se haya participado o no.

@periodistamex

ASME