El valor de nuestro voto

Communitas

Ganamos, sin duda alguna. Esta elección intermedia registró una participación estimada entre 51.7 y 52.5 por ciento, y por ello, decir: ¡Ganamos! No es mentira. La ciudadanía hemos aprendido a darle valor a nuestro voto, para refrendar, modificar o retirar la confianza que tenemos hacia quienes nos representan.

Las primeras planas de los principales medios de comunicación de este lunes dieron cuenta de la llamada de atención que ha recibido el partido en el poder, Morena, al perder la mayoría calificada en la Cámara de Diputados, la cual le permitía hacer modificaciones constitucionales, casi al antojo.

Adicionalmente, a pesar de que hubo notorias expresiones de violencia en contra de candidatas y candidatos -incluso unas horas antes de la elección- no se presentaron grandes y graves incidentes que pusieran en riesgo la legalidad de la jornada electoral.

En el caso del Estado de México, los resultados que hasta este momento ha arrojado el PREP, tanto del Instituto Electoral de la entidad, indican que -de manera silenciosa, prudente y estratégica- hubo buena operación política de los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) para recuperar posiciones importantes en la Legislatura estatal, al obtener 20 curules como coalición, y adicionalmente dos posiciones para el PRI y una más para el PAN, lo que les permitirá obtener margen de maniobra.

Con ello, la percepción que se ha generado para quienes ahora son oposición al gobierno federal es que no todo está perdido y que la maquinaria morenista que en 2018 lo avasalló, ya muestra señales de desgaste -como es natural en el ejercicio del poder.

Ahora vendrá la tarea más complicada: cumplir las expectativas que se han generado en las candidatas y los candidatos, porque para algunos significa una nueva oportunidad  y habrá que lograr los equilibrios en los gobiernos de coalición.

Para el gobernador, Alfredo Del Mazo Maza y para su partido, los resultados significan una esperanza para continuar en el poder, a diferencia de lo que algunos ya cantaban en el sentido de que en la sucesión de 2023 había muy poco por hacer y que sólo se transitaría -en los siguientes dos años del periodo del gobernador- hacia una alternancia política. No es así.

Las votaciones de este domingo 6 de junio enviaron un mensaje de aliento para esa clase política mexiquense y acreditan que -de manera cuidadosa y sin tanto aspaviento- el trabajo de operación en tierra y el manejo prudente de la relación con el presidente López Obrador, ha generado buena percepción.

Ahora, corresponderá la gestión de las nuevas y los nuevos actores políticos que surgen con estos resultados, porque obtener votaciones tan significativas como en Toluca y Metepec, por mencionar un par de ejemplos, sin tener la operación desde el gobierno federal -como ocurrió en otra época- y sin la estructura a su favor, representa el fortalecimiento de los partidos que parecían minimizados ante el poder presidencial.

Un caso concreto es Ana Lilia Herrera Anzaldo, quien logró una votación muy nutrida para la Cámara de Diputados Federal, al competir por una curul de mayoría. A pesar de lo complejo que fue el proceso, obtuvo 104 mil 252 votos, siendo la segunda mujer más votada (por debajo de Margarita Zavala), y se ubica entre las 7 personas más votadas de la próxima Legislatura federal. Eso, sin duda alguna, la comprometerá mucho más con su entidad como siempre lo ha acreditado.

PERCEPCIÓN

Vienen los reacomodos en el Gobierno del Estado de México luego de estos resultados.

ASME