Embarazos en adolescentes

Uno de cada cuatro embarazos en México es de adolescentes que ponen en riesgo su vida o cancelan buena parte de sus estudios y su trabajo. Por falta de información y de efectivos programas de salud. Los últimos tres lustros han sido de retroceso en esa materia. México se encuentra entre países como Brasil, Colombia y Paraguay, Gahana y Etiopía. En décadas recientes, el porcentaje entre 12 y 19 años se incrementó de 7.40 en 2000 a 8.0 en 2012. Se incumplió el PND. 58 nacimientos adolescentes por cada mil mujeres.

En México, de acuerdo con la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica 2009, la tasa de fecundidad en adolescentes es alta, aproximadamente de 70 nacidos vivos por cada mil mujeres de 15 a 19 años, es decir, 360 mil nacimientos anuales, de los cuales se estima que más del 40 por ciento corresponde a embarazos no planificados, (Mexfam).

Latinoamérica es la región con mayor índice de embarazos no deseados, ya que diariamente alrededor de 27 mil mujeres quedan embarazadas sin haberlo planeado. Entre las principales causas de los embarazos no planificados se encuentra la falta de uso de métodos anticonceptivos, debido a que el 61.5 por ciento de los adolescentes de entre 15 a 19 años no se protege al iniciar sus relaciones sexuales, y aún con vida en pareja el 24.6 por ciento no utiliza anticonceptivos a pesar de no querer tener hijos.

Embarazo precoz y drogadicción, adolescente entre los 12 y 15 años de edad ya llevan una vida sexual activa y comienzan con problemas de drogadicción. Luego de la implementación del programa de educación y de salud para jóvenes y adolescentes que se está aplicando principalmente en las secundarias al oriente de la ciudad, se han encontrado con estos casos en los que menores se vuelven presas fáciles para ser engañados en temas de sustancias ilícitas.

México no está ni cerca de cumplir el objetivo, que es de reducir a 22.2 por cada 100 mil niños nacidos vivos el número de muertes de mujeres por causas del embarazo y el parto. La Mortalidad Materna (RMM) en México es de 43, de acuerdo con Conapo. Y si bien es cierto que se ha avanzado desde 1990, cuando era superior a 50, sigue siendo inaceptablemente alta.

Nuestro Estado es la entidad con mayor número de jóvenes. Aquí habitan 4 millones 908 mil 743 jóvenes, es decir, hombres y mujeres que se encuentran entre los 12 y 29 años de edad y que representan 32.32 % de la población mexiquense.

En el tema de la salud, el 51.13% cuenta con derecho-habiencia. Se estima que al 51.49%, los atiende el IMSS; al 6.38% el ex Seguro Popular, ahora Insabi y al 3.93% el ISSSTE.

Una de cada 5 mujeres menores de 20 años está embarazadas, cifra que se mantiene desde hace años. “Nuestra población joven adolescente es muy grande, lo único es que han cambiado las causas (del embarazo precoz)”, antes era por desinformación, pero ahora es por la construcción social que indica que por ser mujer hay que ser madre. “A los 14 años quieren ser mamá, muchas chicas tienen una pareja creyendo que es estable y para consolidarlo quieren tener un bebé” (Plafam).

Aborto. Como han mostrado diversos autores, el aborto inducido es una práctica ancestral y generalizada que se ha observado en todos los países, contextos rurales y urbanos, estratos pobres y ricos, entre mujeres casadas y no casadas o de distintas edades y en momentos diferentes de su vida reproductiva. Tal recurso también se ve influido por factores sociales, económicos, demográficos y culturales (United Nations, 1994), (Mundigo y Shah, 1999). En un artículo sobre la situación mundial de las mujeres que se han practicado un aborto inducido se señala que su incidencia puede variar, de acuerdo con la edad, el estado conyugal, el nivel educativo, el grupo socioeconómico al que éstas pertenezcan y con la región rural o urbana donde habitan.