El Juego del Calamar; una serie llena de simbolismos
En los últimos días la serie coreana “El Juego del Calamar”, ha conseguido un boom a semanas de su estreno, siendo una de las más vistas en la plataforma de entretenimiento estadounidense, la cual está llena de simbolismos y condiciones que abonan a esa respuesta del público.
Narce Ruiz Guzmán, docente de tiempo completo de la Facultad de Humanidades en el Tec de Monterrey Campus Toluca, compartió algunos elementos y factores que han llevado al éxito de la serie coreana.
La iconografía del juego es el círculo, el cuadrado y el triángulo, símbolos que se repiten a lo largo de la serie, la cual basa su nombre en un juego infantil de Corea, donde se da el dominio de una élite sobre los desfavorecidos.
“Se dice que la base el cuadrado que es más grande, es la mayoría de la gente, el triángulo representa a una cúspide, digamos gente que tienen mayor poder, pero arriba hay un pequeño círculo, esa es la elite que domina y hace estos juegos perversos de ponerlos a matarse entre ellos, y el círculo pequeño abajo del cuadro, representa a esta minoría, la gente más pobre o que vive en condiciones más extremas”, detalló.
O las máscaras de los VIP, por la forma como hablan y cómo se expresan denotan a ricos estadounidenses, con colores dorados para mostrar esa opulencia y riqueza, con formas de animales depredadores naturales, como águilas y tigres.
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También destacó el hecho que el tema de los juegos de élite no es nuevo, pero la forma cómo es abordado en la serie coreana cobra nuevas connotaciones, por la representación demográfica de los jugadores, una chica exiliada de Corea del Norte, un pakistaní, el fanático religioso.
La académica consideró que el éxito del programa también se debe a diversos factores, en un análisis audiovisual, destacó el gran nivel de producción que tiene.
“Creo que gran parte del éxito de El Juego del calamar reside en la forma como está retratada, el tipo de planos que utiliza, y sobre todo el tema de los colores, el verde esperanza que utilizan todos los jugadores en sus pants, ese cochinito dorado que tienen visualmente es un recordatorio de que están jugando por dinero, y luego esos uniformes rosa magenta”, precisó.
Y añadió: “La música con melodías de fondo entre música clásica y música que causa mucha tensión. Toda la producción está enfocada justamente en engancharnos y lo logra, su estructura de narración es muy simple, cada capítulo es un juego y sabemos que alguien va a morir”.
Su éxito también se debe a la cantidad de memes en las redes sociales, donde ya se trastoca otros significados y que a su vez permite llegar a más público, ya que varias personas por eso comenzaron a verla.
Así como la moda por la cultura coreana, la cual desde hace varios años está invadiendo no solo la escena musical con las bandas de K-pop, también con producciones audiovisuales ganando un Óscar con Parásitos en 2020, al vencer con éxito las barreras narrativas asiáticas y occidentales.
SPM
