Juguetones y disciplinados, así son los canes militares

El adiestramiento comienza desde los 4 meses de edad y después de 10 años de vida operativa, son enviados al asilo

Parece un juego, pero cada actividad les permite ejercitarse y aprender a detectar drogas y explosivos que pudieran poner en riesgo la seguridad de la base aérea militar de Santa Lucía, en Tecámac. 

Se trata de 27 perros operativos, integrantes de la Sección Canina de la policía militar, a cargo de la sargento segundo del Tercer Batallón de Servicios Especiales, Leslie Yucari Juárez Valle.  

Con ella al mando, los binomios reciben su entrenamiento cada mañana, en unas canchas nuevas habilitadas en las inmediaciones de las obras del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA)

¿Quiés son los perros militares?

Sarcasmo, Tonalidad, Aceituna, Sacrificio, Corcholata, Recodo y Quimero, son algunos de perros policía de esta sección.  

Como cualquier otro miembro del Ejército, deben pasar lista, disciplinarse y esperar a recibir instrucciones, en su caso, de búsqueda. 

Todos nacieron en el Centro de Reproducción Canina de las Fuerzas Armadas, solo para servir a la Nación.  

Entrenan desde los 4 meses de edad

Juárez Valle explicó que el adiestramiento de los canes comienza desde los 4 meses de edad y después de 10 años de vida operativa, son enviados al asilo del mismo centro, para pasar su vejez y morir.

Abordaje ya aprendió a desarrollar su sentido del olfato y a detectar perfectamente cualquier tipo de droga. 

“Hoy en día el tráfico de enervantes ha ido avanzando en nuestra sociedad. Ha habido búsquedas donde muchas veces no se piensa que haya resultados. Pero el olfato de nuestros canes es tan desarrollado; y tienen un alto nivel de adiestramiento que logran detectar los olores a pesar de llevar, incluso comida”.

Perros militares detectan drogas

A Recodo le gusta saltar los obstáculos y está especializando también en la búsqueda de estupefacientes.  

La sargento añadió que, por las necesidades de este batallón, en la base militar de Tecámac solo cuentan con canes de búsqueda de explosivos y drogas, pero que dentro del Ejército hay diferentes unidades operativas que se mueven en todo el territorio nacional.  

Cada uno de los canes ha creado un vínculo con su binomio y con la sociedad, pues al verlos en acción generan admiración y respeto. 

Especialidades de adiestramiento 

Los perros de la policía militar de Santa Lucía son adiestrados en 3 especialidades: Guarda protección y rastreo; búsqueda y localización de explosivos, búsqueda y localización de enervantes.  

Para que cumplan su labor, los perros deben pasar primero por tres etapas de socialización: hombre – hombre, hombre – humano y hombre – medio ambiente. 

La sargento Juárez Valle detalló que a cada can se le asigna un entrenador con el que deben formar un vínculo muy fuerte para lograr resultados positivos.

Una vez conformado el binomio, cada mañana salen a ejercitarse y a entrenar por bloques de 20 minutos, en situaciones apegadas a la realidad.

Los que buscan drogas

Una es colocando maletas, como si estuvieran en la aduana del aeropuerto, para identificar la que tiene alguna dosis de droga.  

Otra consta de formar a unos elementos vestidos de civil con la intención de que ubiquen al que porta el enervante entre sus prendas.  

Un año dura en adiestramiento

Cada animalito requiere de al menos un año de adiestramiento, antes de entrar en acción y acompañar en las labores de vigilancia o rescate. 

Por el momento, los 27 integrantes de este agrupamiento se utilizan en la vigilancia de los accesos a la base aérea; sin embargo, no se descarta que algunos sean destinados a las labores dentro de la nueva terminal aérea que iniciará operaciones en marzo del 2021. 

Nacen y mueren con el Ejército perros militares

Todos los perros que conforman la Sección Canina de la policía militar de Santa Lucía son pastor alemán y pastor belga Malinois.  

Estas razas, por sus características físicas y destrezas, son las elegidas por el Ejército mexicano para criar y crear el agrupamiento canino de élite. 

El nombre de cada uno de los canes es determinado por el alfabeto, según el año de la camada en que nació. 

Cuentan con su propio criadero

Ninguno puede ser dado en adopción y tampoco se recibe alguno para este fin. Es por ello que las Fuerzas Armadas cuentan con su propio criadero y de ahí son distribuidos en todo el territorio nacional.  

Como ocurre con los soldados, ellos también son rolados según sus habilidades, en las diferentes unidades o zonas militares del país. 

Cuando alguno de los perros policías cumplen con sus 10 años de operatividad, son devueltos al centro de reproducción, donde se les asignan tareas propias a su edad simplemente para descansar hasta que concluya su vida.  

Oportunidades de vida 

La sargento Leslie Yucari destacó el amor que ella y cada uno de los manejadores tiene por los animales, quienes no solo son una herramienta de seguridad o una mascota.  

Recordó que cuando ingresó al Ejército, buscó la manera de ser asignada a esta sección, donde tendría la oportunidad de, junto con los perros militares, ayudar a la ciudadanía.  

“Si me adiestro bien yo y a mi perro puedo darle una oportunidad de vida a una persona; me da un gran sentimiento saber que a través de mi can y de mí, hay una persona que puede tener una oportunidad de vida en situaciones de siniestro”.

ASME