La OFIT regresó ante el público en la Catedral de Toluca

Con acceso controlado

Luego de una pausa forzada de más de seis meses, la Orquesta Filarmónica de Toluca (OFT), encabezada por el maestro Gerardo Urban y Fernandez, regresó a sus tradicionales conciertos en la Catedral de Toluca con público, en esta ocasión interpretaron la Quinta Sinfonía de Beethoven.

Fue el pasado 10 de septiembre que la OFIT regresó con un concierto donde se tocó la Primera Sinfonía de Beethoven para iniciar los festejos que en esta temporada ofrecerá la orquesta de la ciudad; no hubo público y fue una transmisión a través de su Facebook. 

Para este evento, quien pretendía asistir mandó vía Inbox sus datos y el de las personas que la acompañarían; sólo se permitió el acceso a mayores de edad. El público arribó desde las 18:00 horas para identificarse y presentar un cuestionario que les llegó a manera de confirmación; nadie que no estuviera en la lista pudo acceder. 

Previo a ingresar, se tomaron todas las medidas de seguridad, como fue portar cubrebocas, el cual debieron usarlo durante todo el evento; la gente pasó por el tapete sanitizante, toma de temperatura y uso de gel antibacterial. 

Antes de iniciar, el maestro Gerardo Urban se mostró emocionado de poder tocar ante un público pues aseguró que es parte de lo que disfruta el artista y, en particular, los músicos.

“No saben la alegría que nos da que ustedes, personas que lograron tener hoy un lugar aquí, nos acompañen; como ya lo dije antes, ustedes son los representantes de más de mil corazones que se quedaron sin poder venir a la catedral a escuchar ni más ni menos que a Beethoven”, dijo.  

El maestro Urban y Fernandez ofreció, como acostumbra, una explicación detallada de cada melodía para que los asistentes y quienes siguieron el concierto de manera virtual pudieran entender las notas que interpretaron con tanta vehemencia y recordó la vida difícil de este gran músico 

“Si alguien sabía de la adversidad y las dificultades de la vida, fue Beethoven; a través de su música nos enseña que lo que algunos llaman destino, erróneamente probablemente porque mas allá de se un artista era un filosofo, y él nos quiere decir más cosas de las que se pueden entender con las palabras”», comentó.