Metro y Movilidad Metropolitana
Diálogo en silencio
Los temas metropolitanos representan un reto para las autoridades por la complejidad en la dotación de servicios para un número importante de personas que ahí habitan. La movilidad, la seguridad, el medio ambiente, la dotación de servicios, principalmente el agua potable, son todo un galimatías que deben poner en orden y resolver.
La Zona Metropolitana del Valle de México, es una de las más grandes del mundo, se ubica dentro de las primeras cinco en el orbe; se integra por las alcaldías de la Ciudad de México, más de 50 municipios mexiquenses de la zona conurbada y uno más de Hidalgo, que es Tizayuca. Habitan más de 21 millones de personas. De ese tamaño son los retos.
En el caso del Estado de México, más del 80 por ciento de su población habita en zonas metropolitanas.
TE SUGERIMOS: Primero el 23 y luego el 24
Los desafíos son enormes. Y el de la movilidad es uno de ellos. No hay fronteras para el paso de decenas, quizá cientos de miles de personas que viven en el Estado de México y se trasladan a sus centros laborales en la capital del país, invirtiendo no sólo dinero para su desplazamiento sino tiempo en horas viaje.
En una entrega anterior, se expuso el caso de un ciudadano mexiquense de Atlautla en el oriente del Estado de México, que tenía que salir antes de las dos de la mañana para tomar un colectivo, llegar a Pantitlán y comenzar el traslado por metro hasta llegar a su trabajo en San Joaquín, esto de lunes a sábado antes de las siete de la mañana. Y como él, miles de personas replican rutinas similares diariamente.
De acuerdo con un estudio del Instituto de Políticas para el Transporte y Desarrollo, los medios de transporte más utilizados por los mexiquenses que tienen que incursionar a la capital del país, son el metro con un 83 por ciento y transporte colectivo con un 77 por ciento.
Por ello reviste importancia el inicio de mantenimiento y modernización de la línea 1 del Sistema de Transporte Colectivo Metro, ya que es el medio por el que se desplazan miles de mexiquenses, que tendrán que modificar sus rutinas ante estos ajustes, lo cual implica invertir un poco más de tiempo.
TE SUGERIMOS: La Crisis del Agua
La línea 1 del metro fue la primera en entrar en operaciones desde hace 53 años. Transporta hasta un millón 300 mil usuarios, que representan en promedio el 16 por ciento de la afluencia total de pasajeros de la Red del Sistema de Transporte Colectivo.
A partir de esta semana comenzó la primera fase de mantenimiento que va de Pantitlán a Salto del Agua; durará cerca de ocho meses para concluir en febrero del 2023; la segunda fase es de marzo a agosto del próximo año y considera a las estaciones de Balderas a Observatorio; los trabajos no sólo eran necesarios, sino urgentes y no podían esperar más si se toma en cuenta que desde hace 13 años había acabado la vida útil de dicho sistema.
El reto es mayúsculo, pero en la conferencia de Transporte Sostenible organizada por la ONU se mencionó que el transporte público debe ser la base de la movilidad urbana y “por cada dólar invertido, crea tres veces más puestos de trabajo que la construcción de nuevas autopistas”.
Así es que paciencia en los traslados.
