Millones de humanos beben gotas de agua, mientras la industria acapara millones de litros

Soyaniquilpan y la embotelladora Niágara Bottling, un caso muy local

Poca agua para el pueblo y racionalizada, mientras la industria la acapara con sus concesiones sin límite. Sobreexplotan acuíferos y consumen más agua al año que la concentrada en el Sistema Cutzamala.

Plantas mineras, refresqueras, cerveceras y armadoras de autos ligeros, concentran al año un volumen superior a la capacidad de almacenamiento del Sistema Cutzamala según análisis de expertos.

«Ante la sequía que se vive en el país, las presas han disminuido peligrosamente sus niveles de almacenamiento y autoridades dan a los ciudadanos la responsabilidad de cuidar el agua. Sin duda hay que evitar el desperdicio y cambiar la forma de consumo; pero el desabasto no es nuestra responsabilidad»

Nathalie Seguin, de la organización Red Mexicana de Acción por el Agua.

Desabasto de agua es culpa de modelos de gestión obsoletos

Asegura que el desabasto de agua tiene que ver con un modelo de gestión de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) obsoleto, solapado por la Ley de Aguas Nacionales (LAN). No contempla el líquido en forma transversal ni considera ecosistemas para cumplir su ciclo.

Por el contrario, permite su concentración y acaparamiento hasta por 60 años. El 2.1 por ciento de los usuarios detentan 61.4 por ciento del agua, refiere.

El director del Organismo de Cuenca Aguas del Valle de México, Víctor Bourguett, hace unos días consideró como una “buena idea” establecer programas de eficiencia en el uso del agua en la industria, a la cual se le exige el costo de la tarifa y mientras “más consuman, más pagan”.

Los acaparadores

En México hay sectores industriales, como plantas de minería, de cerveza, refrescos y armadoras de autos ligeros que en conjunto suman un volumen de 837 millones 245 mil metros cúbicos al año para sus actividades, indica el reporte Captura política, grandes concentraciones y control de agua en México, realizado por la UNAM y Oxfam.

Sólo como referente, el Sistema Cutzamala, en las presas Valle de Bravo, Villa Victoria y el Bosque, tiene una capacidad de almacenamiento de 782 millones de metros cúbicos.

La industria goza de privilegios y omisiones

El informe precisa que la industria cervecera cuenta con 18 plantas embotelladoras, sobre todo en el norte y centro del país, la mitad en zonas con déficit de agua.

Las refresqueras, en su mayoría, están en acuíferos sobrexplotados, sobre todo en el centro del país. Las armadoras de autos están en el centro, bajío y norte, en corredores industriales, también en acuíferos sobrexplotados.

«La industria goza de gran cantidad de agua para la producción de sus productos. No ocurre lo mismo con la población; lo que profundiza la marcada desigualdad ante la falta de agua potable, así como en el acceso a concesiones por parte de las comunidades campesinas e indígenas”.

La minería

Tan sólo la minería en 2014 extrajo 437 millones de metros cúbicos, suficiente para abastecer a la población de Baja California Sur, Colima, Campeche y Nayarit. Ésta se cuenta entre las actividades industriales que causan mayor impacto sobre el medio natural, señala Manuel Llano, de CartoCritica, en un análisis de las concesiones de agua a este sector.

La LAN permite este tipo de acaparamiento y la Ley General de Derechos favorece que los usuarios de agua con fines de lucro paguen centavos por cada metro cúbico, apunta Nathalie Seguin.

Señala la necesidad de actualizar la información sobre el uso del agua, porque aún se dice que el sector agrícola es el principal consumidor, pero “cuando se investiga y revisan sus pozos, se ve que son utilizados por inmobiliarias, refresqueras, mineras”.

Se desconoce si se mantienen en el límite de extracción de agua autorizado, ya que los usuarios deben contar con medidor y muchos ni siquiera lo tienen, señala.

El caso de Soyaniquilpan, Edomex



Soyaniquilpan es un municipio situado al norte del Edomex que cuenta con un manantial enorme que lo ha abastecido toda la vida. A ellos y a muchas otras poblaciones aledañas, del vital líquido que jamás les faltó.

Hace unos años llegó la trasnacional envasadora de agua potable Niágara, que inauguró el gobernador Alfredo del Mazo con bombo y platillo, asegurando que sería una importante fuente de empleo. La verdad es que sólo ha contratado a 10 personas del municipio, aseguran los habitantes.

Lo que sí ha sido notorio es la falta de agua que ha provocado, pues ya casi seca al manantial Ojo de Agua que jamás tuvo problemas de producción.  Ante esta situación, los habitantes del municipio hace unos días se manifestaron frente a la embotelladora Niágara Bottling, a la cual acusan de sobreexplotar los mantos acuíferos. Aseguran que diariamente extrae un millón de litros agua.

“El Ojo de agua, el cual nos abastecía, está casi seco. Luego de recibir agua de ahí toda la vida, ahora tenemos que comprarla en pipas que traen de otro pozo llamado El Quinte” aseguró una de la vecinas de San Francisco Soyaniquilpan.

Los manifestantes aseguraron que la empresa Niágara Bottling es una de las más grandes del mundo y en México sólo tiene dos plantas, una en Monterrey la otra en Soyaniquilpan.

Conagua les otorgó siete concesión de explotación por 10 años

En 2019 fueron inaugurados el parque industrial Arco 57 y la embotelladora Niágara Bottling a quienes, según los manifestantes, la Comisión Nacional de Agua (Congua) les otorgó siete concesiones con una vigencia de diez años para explotar el acuífero.

Sin embargo, esta zona tenía veda desde 1978 para la entrega de nuevas concesiones para la explotación y aprovechamiento del agua, ya que la región es susceptible a los efectos de la sequía y aún así se otorgaron los permisos que ya pusieron en jaque a la población.

Los inconformes aseguran que ya se han metido quejas y amparos para parar la producción de esta empresa que asegura, «sólo vino a embotellar nuestra agua para venderla al mundo».

ASME