Otra vez el Cutzamala

 Una vez más el Sistema Cutzamala lanza señales de alerta que no se pueden minimizar o normalizar. Son signos de alarma cuando se trata del principal abastecedor del vital líquido a una de las zonas metropolitanas más grandes del mundo.

Y es que pareciera que la sequía deshidrata al Cutzamala. Es una realidad; pero ¿acaso pensábamos que iba a ser eterna esa fuente hídrica? Por supuesto que no y ahora se pueden empezar a pagar las consecuencias.

Por ello como una medida de prevención, ante la escasez de lluvias en los dos últimos años y la baja de los niveles en las presas que integran el Sistema, se registra a partir de esta semana el recorte en 13 municipios del Estado de México: Acolman, Atizapán de Zaragoza, Coacalco, Cuautitlán Izcalli, Ecatepec, Huixquilucan, Naucalpan, Nezahualcóyotl, Nicolás Romero, Tecámac, Tlalnepantla, Toluca y Tultitlán.  

Mientras que en la Ciudad de México la medida afectará a las alcaldías de Álvaro Obregón, Azcapotzalco, Benito Juárez, Coyoacán, Cuajimalpa, Cuauhtémoc, Iztacalco, Iztapalapa, La Magdalena Conteras, Miguel Hidalgo, Tlalpan y Venustiano Carranza.

Los niveles de almacenamiento del Sistema Cutzamala se encuentran al 47.7 por ciento, esto es 19.6 por ciento menor al promedio histórico. La presa de Villa Victoria registra el nivel más bajo con 36.3 por ciento de llenado; la presa El Bosque está a la mitad de su capacidad al igual que Valle de Bravo que tiene el 51.7 por ciento.

La sequía ha pegado. 

En la publicación Secuencia. Revista de historia y Ciencias Sociales disponible en la plataforma Redalyc, Miguel Esparza refiere en la obra La sequía y la escasez de agua en México. Situaciones Actual y Perspectivas Futuras, que la sequía se define como la disminución o la ausencia de precipitaciones pluviales respecto al índice anual y, contrario a lo que se supone, establece que es un evento normal y recurrente que se presenta de forma cíclica en todas las zonas climáticas del mundo.

En este sentido el especialista refiere al artículo de investigación Reconstrucción de 350 años de precipitación para el suroeste de Chihuahua, México, elaborado por Julián Cerano Paredes y otros autores, en donde se concluye que de 1900 a la fecha, las sequías se han repetido cada 20 años; situación que se ha intensificado después de 1970 con sequías cada década.

Miguel Esparza además puntualiza que una sequía puede durar en promedio de uno a tres años y termina cuando las lluvias regresan y se recupera el índice normal de precipitación y se restablece el funcionamiento de los cuerpos de agua.

Lo que debe llamar la atención y no pasar por alto es que recorte en el suministro de agua para la Ciudad de México y municipios mexiquense se presenta en temporada de lluvias, no de estiaje y que no se debe a trabajos de mantenimiento como tradicionalmente ocurría cuando se aplicaba la reducción en el caudal. 

A ello hay que agregar situaciones que se viven a consecuencia de la sequía en otras regiones del país, específicamente en Nuevo León, , que por cierto no es nuevo, ya que acuerdo con Julián Cerano, décadas atrás se habían presentado situaciones similares por ejemplo en la de 1970 que fue caracterizada por una extrema sequía para el norte de México, especialmente los años de 1971, 1972, 1974, 1975, 1976 y 1977. 

Un tema que no tiene mañana.

Para comunicarnos le dejo mi correo electrónico y Twitter:

rosalio.soto70@gmail.com

@periodistamex