Policías enfrentan maltrato laboral y social

Elementos coincidieron que pasan largas horas bajo el rayo del sol, a otros les cobran cuotas para poder usar una patrulla y unos deben cumplir con remisiones

Policías que se encargan de la seguridad en municipios del Estado de México expusieron diversas problemáticas a las que se enfrentan para conservar y hacer más llevadero su empleo.

Algunos, coincidieron, pasan largas horas bajo el rayo del sol, a otros les cobran cuotas para poder usar una patrulla.

Unos más deben cumplir con remisiones ante el juez calificador para generar ingresos a las arcas municipales.

Y aunque también hacen detenciones de delincuentes y logran ayudar a personas en situaciones de riesgo, aseguran que en diversas situaciones se conflictúan con ciudadanos que han dejado de confiar en ellos como institución.

“Cuando entré a trabajar como policía, lo hice con la ilusión de hacer el bien a mis vecinos, de cuidarlos y portar el uniforme con mucho orgullo»

«pero con el paso de los años he tenido que adaptarme a situaciones con las que a veces no estoy de acuerdo”, relató un policía con seis años de servicio en Texcoco.

En Jaltenco, otro elemento reconoció que en algunos momentos se vio obligado a retener camionetas de carga que pasan por el territorio, para cumplir con la orden de sus superiores.

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“No es algo que me dé orgullo, pero aquí hay que seguir órdenes o te castigan. A muchos los corren por no alinearse y en mi caso, no me puedo dar ese lujo porque tengo una familia que mantener”, expuso.

Ambos policías consideraron que los 10 mil pesos que ganan al mes no son suficientes ni justos por las diferentes tareas que realizan, ni el riesgo que éstas les representan, en las que incluso podrían perder la vida.

En relación con los casos en que ciudadanos golpean a los oficiales, coincidieron en que se ha vuelto común que los jóvenes o cualquiera a quien pretendan llamar la atención, hombre o mujer, les responda con palabras altisonantes, golpes y hasta amenazas de muerte.

Decae la confianza

En algunas de esas escenas están involucrados elementos de Ecatepec, Texcoco y Chicoloapan, quienes son agredidos a golpes por los infractores.

Este tipo de acciones visibilizan la problemática a la que se enfrentan las policías en nuestro país, pero sobre todo en el Estado de México, donde hay 125 cuerpos y una fuerza estatal con 17 mil elementos en las calles.

Las agresiones podrían ser solo el reflejo del poco nivel de confianza que tienen los mexiquenses hacia quienes están a cargo de su seguridad, ya sean de nivel local, estatal o federal.

Recientemente el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) presentó los resultados de la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental (ENCIG) 2021.

En ella se midió la percepción sobre el grado de confianza que la población tiene tanto en personas presentes en su entorno, como en instituciones públicas y de la sociedad civil.

Los números revelaron la decadente confianza que inspiran los policías entre los habitantes del Estado de México, donde 8 de cada 10 tienen una opinión negativa hacia los elementos de seguridad.

Incluso el  93.1 por ciento de los mexiquenses percibió que la corrupción es una práctica muy frecuente o frecuente en los uniformados.

Pero esa desconfianza no es solo de la ciudadanía hacia la policía, sino también de policías hacia sus mandos superiores y los gobernantes, a quienes acusan de dejarlos en el abandono, según investigaciones de especialistas en temas de seguridad.

Abandono institucional

¿Cuál es la situación de las policías en México? Es uno de los cuestionamientos al que la organización Causa en Común ha puesto gran interés y destinado varias investigaciones.

Con el objetivo de contribuir al conocimiento de las condiciones y circunstancias que padecen las policías en México, el pasado 25 de mayo dio a conocer un informe.

En él se abordó temas de presupuesto, jornadas laborales, paros y manifestaciones, asesinato de policías y los riesgos de la militarización.

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El informe sugiere que este sector está padeciendo las consecuencias de un abandono institucional, en el que los policías desarrollan su trabajo en condiciones cada vez más precarias, al tiempo que la violencia extrema se arraiga en todo el país.

“Trabajan turnos de 24 horas o más, carecen de sueldos y prestaciones adecuados, no cuentan con equipamiento ni capacitación suficiente y, en algunos casos, deben soportar tratos denigrantes y de violencia al interior de sus corporaciones”, indica el documento.

Añade que esto explicaría que en el actual sexenio se hayan registrado al menos 129 paros, 51 emplazamientos a paro y 73 manifestaciones de policías que exigen mejoras en sus condiciones de trabajo.

El Estado de México figura entre las entidades con más movilizaciones de este tipo, entre diciembre del 2018 y abril del 2022 hubo 12 paros, 3 emplazamientos y 6 manifestaciones.

Los principales motivos de los policías mexiquenses fueron falta de pago, prestaciones y equipamiento; cobro de cuotas; actos de corrupción y cambios de jornadas laborales.

Causa en Común hizo registros periodísticos para contabilizar los policías asesinados en el presente sexenio, los cuales suman al menos mil 567.

El 53 por ciento de los caídos son municipales. Del total, 119 fueron asesinados en el Estado de México.

Salario digno 

En junio de 2021, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) y  la Comisión Nacional de Salarios Mínimos plantearon una estimación para un salario digno de los policías en México.

El objetivo del estudio fue otorgar un referente del ingreso mínimo con el que debería contar un policía por entidad para satisfacer sus principales necesidades y las de su familia, en cuanto a alimentación adecuada, calzado, vivienda, salud, educación y recreación.

Austeridad impide elevar salarios: Seguridad

Rodrigo Martínez-Celis Wogau, secretario de Seguridad del Estado de México, participó en el foro sobre la “Situación de las policías en México”, en el que expuso lo que como institución se está haciendo.

Reconoció que existe una narrativa negativa contra la autoridad y un índice promedio de confianza hacia la policía mexiquense, de entre el 50 y 60 por ciento.

Resaltó que, a pesar de la falta de presupuestos, en el Estado de México se está haciendo el esfuerzo de incrementar el salario en el primer nivel de la policía, el cual ya es de 16  mil pesos aproximadamente.

“Sin duda las policías, sean municipales, estatales, o la Guardia Nacional, que estamos en la calle, que somos el primer contacto, el primer respondiente, nos llevamos la inmensa mayoría de esta narrativa negativa”.

El jefe de la policía mexiquense agregó que se enfrentan a ciertas contradicciones en la legislación de disciplina fiscal y de austeridad.

Ya que la misma impide tener incrementos muy altos de los salarios y de los sueldos.

“Por un lado estamos hablando de la necesidad de incrementar salarios, pero, por otro lado, el mismo andamiaje legal nos complica el incremento”, indicó

Con el apoyo del Instituto para la Seguridad y la Democracia A.C., (Insyde) la corporación avanza en la certificación y a reforzar los protocolos de actuación.

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Consideró que, como autoridades, en general, y como policías, en lo particular, se enfrentan a escenarios y coyunturas muy complicadas.

“Las amenazas y los riesgos que están ahí afuera cada vez son mayores y lo que nosotros tenemos que hacer es incrementar la capacitación de nuestros elementos, es decir hacer de cada uno de nuestros policías un elemento mucho más sólido para que pueda enfrentar la amenaza que está ahí afuera”, dijo.

Consideró que uno de los problemas a los que se enfrentan las policías de todos los niveles de gobierno, son los muchos mecanismos externos de supervisión que al pervertirse, provoca que los elementos, tengan miedo de  aplicar los protocolos de uso legítimo de la fuerza .

“No estoy diciendo que no se tengan que investigar; el éxito de los protocolos es que se pueden detectar estos excesos de uso de fuerza o estas desviaciones al protocolo”, apuntó.

Equipar para generar confianza

El pasado 24 de mayo, el gobernador del Estado de México, Alfredo Del  Mazo Maza, entregó a los agrupamientos de campo:

  • mil 300 cámaras de solapa, mil 200 maletines de primer respondiente y equipo antimotines.

Con ello se tendrá el monitoreo de todo el recorrido y las actividades que llevan a cabo lo elementos.

El mandatario estatal subrayó que tener una policía equipada y capacitada para actuar en situaciones complejas con cercanía y profesionalismo.

Además que genera confianza en la ciudadanía y mejora el desempeño de sus labores.

Consideró que una buena percepción ciudadana impulsa la denuncia, la cual es clave para enfocar estrategias policiales y combatir de fondo la inseguridad.

SPM