Ofrecen platillos alternativos en Semana Santa
Aunque también se ofrece comida tradicional de Oaxaca y la entidad mexiquense
En Malinalco es posible comer en plena Semana Santa, sopa de flor de cempasúchil, pues este platillo es una de las opciones para los días Santos.
Aunque también se ofrece comida tradicional de Oaxaca y la entidad mexiquense.
En el pueblo mágico además es posible encontrar mole de zarzamoras con pechuga rellena de huauzontle, sopa nana que lleva hierbas, chilacayote y elote; tortitas de zanahoria sobre salsa de mango.
Platillos alternativos en Semana Santa
Además de esquites hervidos con pericón con mayonesa de chapulín y hormiga chicatana; sope de insectos, molotes de plátano macho con mole colorado, tostadas de acociles o mole otomí con romeritos y charales.
Malinalco tiene oferta gastronómica que combina los sabores de la cocina prehispánica con las frutas, verduras y hierbas de la región con ingredientes de Oaxaca.
Los platillos están hechos de manera que funcionan para quienes quieren guardar los días santos, porque no llevan carnes rojas, sino insectos y están exentos de mariscos.
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La apuesta es mezclar quelites, pápalos o huauzontles
También hormigas chicatanas, gusanos de maguey, chapulines, elotes.
Pero también artículos que se cosechan en la región como aguacate, zarzamora, mango, plátano y hasta flor de cempasúchil aún fuera de temporada.
Su creador, el chef Carlos Ovalles, mencionó que lo suyo está basado en la cocina tradicional, con elementos de temporada y lo que se encuentra en el mercado yo.
“Lo que tenemos a la mano y lo que bueno la parte de las hierbitas, lo que tenemos del mercado de la gente que cultiva en sus casas y tenemos también ahora la tendencia de la comida mucho más sana y hay gente que no forzosamente es vegetariana o vegana, pero busca un poco eliminar carnes rojas y hay gente que de repente o por gusto o por salud no consume mariscos, entonces buscamos alternativas».
Para él lo principal es ser respetuoso de la cocina y las tradiciones de Malinalco pero también de las de su natal Oaxaca para combinar los elementos de ambas culturas pero sin robar el protagonismo a ninguna de las cocinas.
“En este caso estamos ocupando elementos de la cocina oaxaqueña y de la cocina mexiquense, una cocina mexiquense y una cocina prehispánica», mencionó
SPM
